domingo, junio 05, 2011

El poema que soñé



Esperar como una vieja anciana que se

Convierte en polvo sentada en su mecedora

Esperar la llegada de la bomba inminente

De aquel ultimo segundo de vida

En el que las llamas y la locura

Se apoderan de este mundo

Esperar los aullidos de los lobos

Hambrientos

Que correrán feroces por las carreteras

Rasgando la carne

Esperar a que los ansiolíticos

Se disuelvan en el insomnio

Y los noctámbulos

Se pudran en sus sillones

Iluminados solo por la luz de la televisión

Sin señal

Esperar que las putas

Salgan de sus burdeles

Y consuelen en abrazos maternales

A cada vagabundo que encuentren

Esperar que los mares se desborden

Y los hombres se unan

En una cofradía inmortal

Por quien será

El ultimo en contemplar

La destrucción del todo

Porque la negación del todo

Es la afirmación perpetua de la nada

Y hacía la nada navegaremos

Esperando sonrientes

El suicidio

El silencio

Aguardando

Esperando

Callando

Es

Soy

Fui

Mori

vivi

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