domingo, abril 30, 2006

El juego.


Con fuerza apretó su brazo -aaggg!!!- el dolor le calaba
las entrañas, pero era fuerte, había prometido ser fuerte...

-Vamos nena es solo un poco mas...solo un poco -dijo el hombre con voz ronca quejándose

-Las lagrimas se aglomeraban en sus ojos, y de vez en cuando soltaba pequeños
chillidos de dolor. Pero ella era fuerte, quería ganar...

-ooohh siii, ya casi...casi, vamos , se que tu quieres ganar amor, eres la mejor....

Al oír esas palabras, sus mejillas adoptaron un color rojizo, sabia que el triunfo ya estaba
en sus manos, solo debería resistir el dolor unos minutos mas...Puedo hacerlo se
repitió en sus adentros...son solo unos minutos mas

-AAAhhhhh siii!!!... ya casi.... ya casi...siiii -El hombre, la tomo con sus grandes manos y le propino
un gran beso apasionado en los labios. Ella volvió a sentir aquella sensación
entre sus piernas, algo así como si se orinara. El la soltó, se levanto de la
cama, subió sus calzoncillos, busco en el suelo sus pantalones, y se los puso,
luego se puso su camisa y comenzó a abrochársela...Gane???Estuviste bien ....y
ganaste como siempre...pero recuerda, este es nuestro secreto...Ahora vistase
que va a venir el tío del furgón.

Siiii!!!, yupi!!!!...gracias papá.

1 comentario:

P! dijo...

En Santiago en 100 palabras (iniciativa que podría extenderse a más ciudades) hay un cuento que, al leer el tuyo, recordé:

"Pena Remitida

Deshojada quedó Margarita en el revuelo del patio del cité, bajo el abrazo del conviviente de su madre, cuando al cumplir ocho años, entre globos y reggaetón, él le susurró que la quería: mucho, si guardaba silencio; poquito, si se resistía; nada, si lo denunciaba."


Patricia Middleton.

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