miércoles, octubre 21, 2009
No es mi día
No he hablado mucho aca por mi loco afán de hacer cine.
Pues en mi misión intergalactica por dominar el planeta tambien estan las ganas y la necesidad de hacer cine. He aquí la primer escena de el nuevo cortometraje que estoy realizando con unos amigos para la U.
Disfrutenlo y porfavor dejen las criticas.
A todo el mundo que me lee muchas gracias
lunes, julio 27, 2009
Bienvenido.
Entonces estas ahí parado en medio de la calle. La gran avenida de una ciudad que ruge diariamente. Son las 14:00 de la tarde y la gente debería estar siendo vomitada por los locales de comida rápida, para aglomerarse en las aceras de una forma casi impertinente. Las bocinas de los autos deberían estar golpeando en tus oídos tan fuerte que no te dejarían oír nada mas. Alguien en un acto de valentía debería salir en cualquier momento de una de las partes de cualquier vereda para hacer un acto que considere heroico y sacarte de entre los autos antes de que te conviertas en otra mancha en el suelo de una calle erosionada por los mil doscientos pares de ruedas que circulan a diario sobre ella. Pero ¿que tienes?, nada. Con suerte si la conmoción no te ha congelado la piel y los niveles de adrenalina ya no empiezan a desbordar por todo tú cuerpo. Si prestaras por una milésima de segundo atención a lo que tienes más próximo y dejaras de fijar la vista en un horizonte desolado podrías oír los latidos de tú corazón. Pero ¿que tienes?, estas ahí mismo en el gran trozo de sementó solo, atónito. ¿Es un sueño?, ¿será acaso que tú mente a comenzado a jugarte una broma?, no lo sabes, y no lo vas a averiguar parado ahí esperando que alguien venga y te libere de tu mutismo.
Cuando logras por fin salir del transe que te acompleja comienzas a pensar en la ultima cosa que estabas haciendo antes de llegar aquí. Y eso nos remonta 3 días hacia un pasado hipotético , un pasado que por más que quieras ya no es real, ni siquiera la gran parte de lo que recuerdas es real, quizás tú vieja amiga memoria haya afectado tanto el recuerdo que solo podrás tener nociones vagas de lo que creías que hacías días atrás. Y así, nos remontamos a las 7 am en punto de alguna parte de tu vida, en alguna ciudad. Que tienes?, te levantas sintiendo que mueres por dentro, ¿es la resaca de un día de alcohol talvez?. Como sea, te despiertas algo asustado por el “Bip” de un despertador digital. Es viernes, un viernes de responsabilidades. Te duchas y luego te sumerges en tú traje elegante de día viernes, bajas de tu apartamento y te subes a tu hermoso coche de 10 millones de pesos. Y te adentras en la ciudad camino a tú trabajo, como un pene penetra en la vagina.
A las 10 en punto con suerte estaras en tu despacho. Cecilia tú secretaria al verte correrá ha preparate un café y te dara la información necesaria para seguir con tu vida, hasta por lo menos las 6 de la tarde.
A la hora de almuerzo, recibes una llamada.¿Quien es?, dímelo tú. Claro claro, es Gaspar, tú viejo amigo de la infancia que te tiene una loca propuesta para esta noche. Otro Bar, Pub, disco que importa. Te dice que ha eso de las diez se verán, que pasara por ti y que lleves tu billetera cargada. A la hora de almuerzo vas al mismo restauran de comida hindú, no sabes nada de la india, pero el simple sabor del curry en tu comida te hace amarla.
Luego nos movemos tan rápido como quien acelera con un clic una película y son las 6 en punto. Despachas a tu último cliente y antes de irte besas en la frente a Cecilia por la planificación del día, mañana o quizás la semana pasada será igual, pero piensas que así y dándole un sueldo más alto de lo que debería tener una secretaria promedio contribuyes en su vida.
De camino a casa, pasas por un café. Sublime, crees que es el mejor café que has probado en la vida, si casi puedes sentir el delicioso sabor de los granos tostados deshacerse en tu boca. Pero eso no es lo que nos interesa, volvamos un poco más adelante, son las 12 de la noche y estas en un antro, Gaspar como siempre bebe como si el mundo se pudiera acabar en cinco segundos más, y el no lo nota, pero esta derramando su copa con cada movimiento que hace tratando de hablarle a la chica que esta frente a él, es una escena graciosamente triste, pero que importa, por la mañana ni recordara el nombre de la chica si es que logra acostarse con ella. De repente sucede algo, algo que te llama la atención, de entremedio de la multitud aparece una chica, lleva un arma, una pistola, ¿Realmente tiene un arma? No, es una copa. ¿La conoces?, claro que la conoces, pero no puedes recordar su nombre. Se te acerca y la invitas una copa, Laura, ese era el nombre que no recordabas. Laura es una chica muy atractiva, una rubia algo pecosa, sumergida en un vestido rojo escotada, no tan escotado, pero si lo suficiente como para querer saber que sigue ahí después del escote. Hablas de lo que has hecho las últimas semanas de la última vez que la viste. No, no, no la has estado evitando, al menos eso le dices. Pero tu y yo sabemos que si la has evitado. Un mundo con doscientos millones de habitantes y justo te topas con la persona que quieres evitar en una discoteca, ¿cuantas probabilidades hay para que eso pase?, las mismas como las que existen de que mueras de alguna manera ridícula. El caso es que Laura te habla, de su último paseo a roma, de cómo casi vio al papa y de los vestidos que compro en algún local de alta costura. Ella bebe y bebe y rápidamente comienza a dejar de hablar de banalidades y comienza a hablar de lo que siente por ti. De lo mal que la hiciste sentir al no llamarla nunca más después de la ultima vez que se vieron. Comienzas a sentirte incomodo he intentas buscar a tú amigo con la mirada, pero Gaspar ya no esta por ahí, no puede salvarte, así que estas solo. Para apurar el trámite y deshacerte de ella más rápidamente te ofreces a dejarla en su departamento, ella acepta, porque piensa que realmente ha logrado conmoverte con todo lo que te ha dicho.
Vas conduciendo por la ciudad y Laura no para de hablar de cuanto te ama, de que su gurú le dijo que quizás en otra vida ustedes también habían estado juntos, te dice lo mal que se ha sentido, incluso te confiesa que ha estado visitando un psicólogo y este le ha dicho que tiene un leve trastorno emocional que se reduce en una pequeña obsesión enfermiza a tú persona. Pero te dice que no te alarmes, que ella puede controlarlo. Comienzas a sentir entonces esa pequeña gota que resbala por tu cuello, eso se llama escalofrío, te lo presento. Es entonces en este punto de la historia donde tú y Laura, comienzan a tener una pequeña discusión, y ella empieza a mover el volante haciéndote perder el control. Y ¿que pasa después?, Después te despiertas en tu casa, a las 7 en punto, como todos los días, piensas que todo fue una tétrica pesadilla que te alegra haber superado. Es entonces cuando te levantas y sales de tú casa, es entonces, donde comienzas a notar que no hay nadie en las calles, es entonces donde te das cuenta que solo estas tú parado en medio de la avenida, es entonces cuando aparezco yo y te digo que estas muerto. Bienvenido al purgatorio.
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Versión sin editar, no critique la ortografía.
martes, julio 21, 2009
...
Eres el ruido más amargo
De los sueños más largos
Un grito en el silencio
De los ciegos dionisiacos
Bébete tú pena
Fúmate un tabaco
Límpiate los pies
Tus besos son amargos
Sabes a pecado
Y yo a feto abortado.
Fué
Caminado con pasos lentos
Disolviéndose como cadáveres
En ciudades desoladas
Nos desfragmentamos en el polvo
Y volamos por los aires
Sumergidos en smog
El diluvio de la pena
Es nuestra esperanza.
Ya no podremos devorarnos
Nuestras manos ya nos pesan
Y tú bocas sabe a polvo
Ya no eres un presente
Y yo fui un momento
un momento ya es pasado
Corre por los callejones
Vuélvete neón
Ilumina nuestros pasos
Cobíjanos en alcohol
Fúmame
Soy un cigarro
Intoxícate conmigo
Me inhalas por tus poros
Y me esfumo en tus pechos
Es que ya solo somos Nada
Y lo que
Los Bersuamish
La caravana se desplegaba en un montón de ropajes viejos y andrajosos que se movían en fila recta por las dunas. No eran más de diez hombres y unos cuantos camellos. Y si los observabas con determinación podrías ver entre sus mantas los pequeños agujeros que habían hecho para poder observar el polvoriento paisaje y para poder seguir su rumbo.
Eran hombres que desaparecían a cada paso que se adentraban en el desierto. La fuerte ventolera iba borrando cada huella que dejaban a cada paso, asumo que era esta la razón por la cual mantenían la calma y seguían su rumbo sin mirar hacia atrás, era eso o sentarse a ser enterrado por la arena.
Cuando llegaron a las puertas del Caos los estaba esperando, los antiguos me habían encomendado en el décimo año de mi viaje, la misión de hacerlos cruzar las puertas a salvo. No querían que los Nagash los volvieran locos al devorarles las almas en sueños. No dijeron mucho, mas que tenían alguna especie de ofrenda que entregar a las tribus del Sur. Yo que les debía un par de favores acepte.
Al verme arriba de mi camello en las proximidades de las puertas, se alarmaron, pero les mostré el brazalete de los siete sellos, emblema de los antiguos, y se tranquilizaron. Luego se me acerco uno de ellos, Bhansali dijo que se llamaba, era el más viejo de todos y el líder de la caravana. Estaba envuelto en ropajes andrajosos y tenía un turbante en la cabeza que le llegaba hasta la proximidad de las cejas. Me pregunto si podríamos llegar hasta el otro lado en tres días. A lo que le respondí que si los Varenst se apiadaban de nosotros quizás lo lograríamos. En marcha entonces me dijo y comenzamos nuestra peregrinación.
Galopábamos a pasos firmes para acercarnos antes del atardecer a las puertas. No queríamos estar ahí cuando los Nagash comenzaran a salir de sus cuevas. Les pregunte que porque tenían tanta prisa, a lo que Bhansali me respondió que llevaban el oráculo hacia las tierras del sur para cumplir una vieja profecía Bersuamish. Supuestamente una gran guerra se aproximaba, y las tribus debían tomar una decisión lo antes posible. Las penumbras pronto saldrían de sus escondites y ni siquiera muertos podrían encontrar la paz. “La muerte es solo un pequeño descansó entre esta vida y las próximas” me dijo y si el Gutresharm logra despertar, todos seremos devorados por la eternidad por las fauses del Bersharam y no podremos morir ni vivir nuevamente. Es por eso que te ruego que por los Varenst nos ayudes a cumplir nuestro viaje. Le respondí que así se lo había prometido a los ancianos y que así seria, pero que si quería cumplir con su cometido, tendría que cruzar las macizas por la mañana y que antes de que terminara su viaje tendría que morir. Me miro atónito, pero antes de que pudiera decir algo me apresure a seguir nuestro camino, antes de que en sus mentes las sombras de los oscuros comenzaran a atormentarlos.
sábado, junio 27, 2009
martes, junio 23, 2009
Take me to
Había tres soñadores parados en una pata
En medio de la calle
Cuando pasa una mujer frente a ellos
Y el primero se baja y la sigue
Se casa y ya no escribe
Al rato paso un viejo y les grito Ahueonados
El segundo se baja y se va para la casa
Va a la universidad y ahora esta cubierto en plata
Y el tercero se queda ahí parado en una pata
Esperando a que un día
Pase una persona
Y le diga…
Porque en una pata?
Tú
Es que derramas tus sueños
En papeles arrugados
Es que besas en la nada
A constantes usureros
Es que robas de mi alma
Un pedazo de pecado
Es que ya no somos nada
Si no tenemos sufrimiento
Es el aroma a madera
La humedad que cala
Es el palpar de tus labios
En mis manos arrugadas
Es un soplo de esperanza
Verte cepillar el pelo
Es un grito de desesperanza
El decirte que te quiero
Es un proyectil sin rumbo
El callarme y no decirte nada
Es la magia que se arranca
De Merlín y sus pisadas
Es que eres una pesadilla
De un jueves sin hacer nada
Eres tu mi tostada
Y yo tu mermelada.
Catarsis
A veces me levanto cansado
Cansado del mundo
Me cansa levantarme en las mañanas
Cuando el frió cala los huesos
Me cansa levantarme sintiendo siempre el mismo vació
Sintiendo que mi vieja se rompe mas la espalda
Por financiarme a mi los vicios
Me cansa ser tan iluso
A creerme todo lo que pienso
Me canso de mi mismo
Y de la gente que pasa por la calle
Feos, chicos, gordos, demasiado lindos.
Voy a carretes y me curo
Pero todo siempre sabe a nada
La misma mierda pero con distinto nombre
Victor Hugo Cárdenas Perona
Ese es el nombre que me dio mi vieja
Por algún Escritor maldito
Que le pegaba a las mujeres
Y le hacia el amor a las letras
A veces todo me colapsa
Sentarme en esta mierda
La filosofía barata
La gente rancia
A veces la gente cae en un abismo
A veces me pregunto porque mierda estoy vivo
Pero jamás me suicidaría
Por miedo a que todo sea igual
A quien le importa si tengo plata para el pan
A veces solo me pego
Contemplando el vació
Pero no solo el vació exterior
Si no también el interior
Es que a veces me colapsa todo el mundo
Y aunque arda en llamas por un segundo
No es lo mismo
Que congelar un segundo
Un segundo de esos en que camina una hormiga por el pasto
Un segundo en esos que te crece un pelo
Un segundo de esos de ensueño
Un segundo de epifanía
Un segundo de melancolía
Un segundo en el que todo se detiene
Y nos proyectamos en la nada
Para guardar los sueños
En papeles con caca
Porque a veces
Todo me colapsa
martes, junio 16, 2009
Balada a una chica imperfecta.
Es el aroma a tierra húmeda de tus zapatos
Es tu ropa underground
Son tus palabras de poeta urbano
O tus ojos al llorar
Pero simplemente tu me haces estallar.
Has infectado mi cabeza.
Con tus labios sin pintar.
Me gustan tus dientes imperfectos.
Y la manera en que bailas cha cha cha.
Nena tú realmente me vas a conquistar.
Con tus galletas de canela
Y el café al despertar.
Yo no se lo que te atrae
De mi andrajosa humanidad.
Pero ruego en no cambiar
La particula que te pone
Feliz al madrugar.
sábado, mayo 23, 2009
Fragmento 0.1
Ni en los recovecos del tiempo
Ni en el fulgor de tu alma
Podre olvidar el sabor de tus besos
Tal como la dulce mañana.
Ni las paginas gastadas
De libros polvorientos
Usurparan de la cama
Tus caricias marcadas
Escritas con fuego
Escritas con miel.
Pues el amor
Sabe a ceniza
Y café.
miércoles, mayo 13, 2009
La bruma gris.
A lo lejos, vio venir su figura borrosamente dibujada por la bruma. Las olas, cual infernales caballos galopantes, irrumpían con fuerza en el roquerío, haciendo casi imperceptible cualquier otro sonido. La luz que provenía del faro era el único elemento quizás que hacia algo más nítido el paisaje de la fría mañana. “L”, que esperaba impaciente incrustado en su abrigo, le dio la última aspirada de humo a su cigarro y lo dejo caer. Miró su reloj, tomó la maleta que tenía en el suelo y se dirigió al roquerío que se que se desplegaba tras de si. Ahí, ocultándose, la esperó. Cuando al fin “M” llegó a pasos agigantados al sitio donde se había encontrado “L”, miró su reloj y acto seguido, prosiguió a sacar un lápiz labial de su bolso. Sus labios pasaron del opaco color satín aun magenta más refinado. “L”, que aguardaba en el roquerío, observaba detalladamente las acciones de “M”. Un par de segundos después, aparecía entre la niebla un tercer tipo, cargando algo a cuestas. “M” lo vio acercarse. Entonces, sacó un arma de su bolso y la escondió en su espalda. Cuando al fin el hombre del bulto llegó hasta “M”, dejó caer fuertemente su equipaje en el suelo. “M” lo miró algo extrañada, desafiante lo apuntó con su arma.
-¿Quién eres?-Soltó con desaire-.
-Soy el mensajero. -Respondió el tipo—
-¿Mensajero de quién?. ¿Del cobarde de “S”?
-Jajajaja, exacto, ¿no ha pensado dejar la prostitución y dedicarse al esoterismo?
-Que te creí, imbécil. - Respondió “M”, apuntando con fuerza el arma hacia el tipo.
-¿No cree que seria muy estúpido matar al mensajero, sin antes recibir el mensaje?.
-Dame el puto mensaje.
-Ahí lo tiene usted a sus pies- Dijo el tipo y apuntó el paquete que traía.
“M” abrió el paquete y soltó un chillido de espanto. Sus ojos se llenaron de lágrimas al ver que dentro de la bolsa se hallaba una pequeña niña. Su cuerpo yacía en el interior, con un aire más bien angelical. Con rabia se levantó del suelo, cual demonio enardecido apuntando al mensajero. Su respiración agitada y entrecortada apenas le permitía decir sus súplicas.
--¿Por qué…? –Soltó casi ahogada por las palabras--Hijos de puta, tan sólo era una niña…
“L”, escondido entre el roquerío, sólo podía mirar con asombro lo que estaba ocurriendo. Estaba como paralizado de espanto. Una gota de sudor comenzó a bajarle por las coyunturas de la frente.
-Negocios son negocios y “S”, sabe separar la familia de los negocios, -soltó torpemente el mensajero-.
--¡Pero era su hermana!- dijo “M”
-“S” dijo que no fue él quien la involucró en todo esto. Además, creo que cumplió su función, el mensaje fue entregado. Ahora usted puede entender lo que sintió “S” al verla con otro tipo.
La cara de “L” se desfiguró tan sólo al escuchar que la niña del paquete era la hermana de “S”. El miedo lo cubrió en límites inimaginables que, tan sólo como acto reflejo, comenzó a vomitar.
“M” lloraba como una niña y afirmaba el cuerpo, acercándolo a su pecho. El ruido de las olas golpeaba cada vez más fuerte el roquerío. El mensajero entonces, se dispuso a retomar su camino, y comenzó a alejarse de “M” ,en la misma dirección de la que provenía.
-¿Dónde crees que vas?--le gritó “M”—
Pero el mensajero no se detuvo ni siquiera a mirarla. Por un instante, todo pareció tornarse en silencio y, “L” en los roqueríos, sólo pudo ver a “M” gritar mientras descargaba por completo el cargador de su arma contra el mensajero. La pesada humanidad del mensajero se desplomó en el suelo y, el retumbar de su cráneo al hacer contacto con la tierra, fue el ruido que pareció devolver los demás sonidos a la escena. “L”, cuando vio que el caos comenzaba un poco a calmarse, decidió salir de su escondite y se acercó hacia donde estaba “M”. Ella, que aún no bajaba el brazo después de disparar, se asombró al sentir los pasos de “L” acercarse y, sin pensarlo, lo apuntó.
-Soy yo— soltó “L”—
“M” sólo pudo correr a sus brazos y, cuando estuvo en ellos, se desplomó en lágrimas. “L” la consoló un instante. Mientras las lagrimas de ella empapaban el abrigo de “L”, las olas del roquerío parecieron calmarse un instante.
¿Y ahora? —pronuncio “L”, después de un par de segundos de silencio.
--Trajiste el dinero—Dijo “M”, secándose las lágrimas.
-Sí, está en una maleta, ahí entre las rocas. Apuntó “L” al roquerío tras de él.
--Pues entonces, nos largamos de aquí.
“L” no hizo nada más que asentir con la cabeza.
-Ve por el dinero- dijo “M”
“L” se disponía a ir hacia el roquerío, cuando “M” lo llama y le dice que se acerque. Se devolvió así entonces, y la volvió a tomar entre sus brazos. Acto seguido, ella comenzó a acercársele lentamente hasta terminar por juntar sus labios. “L”, cerró sus ojos y sólo sintió el gatillo del revólver de “M” hacer clic. Su cuerpo se desplomó en el suelo en cosa de segundos. Ella sacó así de su bolsillo un pañuelo, y se limpió el colorete que le quedaba en los labios. Limpió el revólver y lo guardó en su bolsillo. Caminó unos pasos, se acercó al cuerpo de la niña y, tomándolo en los brazos, caminó hacia donde estaba tirado el mensajero. Cuando se encontró con el cuerpo regordete de este a sus pies, le dio una leve patada en el brazo y siguió caminando. El mensajero entonces, comenzó a levantarse del suelo, limpiándose con ambas manos la ropa.
-Encárgate de todo—dijo “M”, mientras se perdía entre la niebla.—El dinero está entre las rocas de allá atrás, yo me iré primero a casa de “S”, antes de que el efecto del somnífero se acabe. No quiero que “P” despierte y vea todo esto.
-Entendido.-dijo el mensajero, mientras se disponía a levantar el cuerpo inerte de “L”, así con la roja visión de los primeros rayos de sol apareciendo entre la oscuridad de la mañana. Él la vio partir.